Imparables

Así estan los Lakers, ayer nueva victoria ante otro de los rivales complicados de la Conferencia Oeste, New Orleans Hornets por 93-86 y aunque el marcador no lo refleja la autoridad con la que ganaron fue increible, un primer tiempo de libro y como suele ser habitual pájara en el segundo que les dió algo de vida a los de Byron Scott.

A diferencia del partido frente a Dallas, Los Angeles Lakers no se dejaron sorprender y salieron muy metidos en el encuentro, muy buena la defensa en equipo con ayudas a Pau que se encargaba de David West (que gran jugador) y a Derek Fisher pues Chris Paul es uno de esos jugadores especiales y que se ha convertido a mi modo de ver en el mejor base de la liga, porque vaya inicio de campaña que lleva. Pero vayamos al partido, buena defensa e intimidatoria por parte de Andrew Bynum (4 tapones) y gran ataque en el que todos los jugadores aportaban algo positivamente, mucho movimiento de balón y como consecuencua de ello canastas fáciles bajo el aro de Hornets. Destacar la actuación de Derek Fisher en ese primer tiempo en el que tenia la muñeca caliente, tres triples suyos hicieron que el equipo se despegara en el marcador rápido y mantenerse asi hasta el descanso en el que dejaron a New Orleans en tan solo 30 puntos.

Tras el descanso el equipo continuaba jugando de manera impecable, muy implicados atrás y saliendo al contrataque en cuanto tenian ocasión de hacerlo, nuevamente Trevor Ariza realizó un gran partido (10 puntos y 4 rebotes) y nuevamente le comió minutos a Radmanovic que dejó para el recuerdo la jugada tonta del partido en la que falla un mate a dos manos por confiarse demasiado, si podéis verla no tiene desperdicio.

Pero ya en el último cuarto se comenzó a ver a los Lakers del año pasado, los que bajan los brazos antes de tiempo y se dejan remontar el partido, y eso estando Chris Paul enfrente no se puede permitir, el pequeño base comando la casi remontada de New Orleans que se puso a tres puntos (83-80) pero Kobe Bryant con un triple sobre la bocina de posesión llevó la tranquilidad al partido, esto y un robo de Derek Fisher a David West en la siguiente jugada, decisivo para que los Hornets se dieran definitivamente por vencidos.

Por lo tanto, séptima victoria consecutiva, un inicio de temporada inmaculado, esperemos que sigan asi pues juegan en casa este Viernes en lo que puede ser un gran partido, Iverson visita el Staples con su nuevo equipo, los Pistons, partido a priori emocionante, veremos que da de si, además tendremos la vuelta de Kwame Brown al que fuera su equipo en parte de la temporada pasada y que sirvió como moneda de cambio para que llegase Pau a la ciudad californiana.