Todo o nada para los Rockets

Cuando tus mejores jugadores son un alero y un pivot de categoría All Star lo cierto es que tienes bastante ganado, y además cuando se encuentran rozando la treintena en lo que se presupone que es la edad que combina el mejor estado físico posible con las tablas que has ido ganando en años pasados, y además están rodeados por buenos complementos, se puede decir que tienes un equipo para competir por lo más alto, el anillo.

Pero para los Rockets esto no es así, se ven lastrados todos los años por las lesiones de Yao Ming y/o Tracy McGrady lo que les impide brillar en los playoffs, y de hecho ninguno de los dos jugadores ha conseguido, pese a su calidad, superar la primera ronda de playoffs en lo que empieza a ser ya una dilatada carrera.

¿Qué hacer cuando te encuentras en esta tesitura?

Sin duda efectuar el movimiento que ha conseguido Daryl Morey, jugártelo a una carta, o bien todo o bien nada, y el nombre en el que ha pensado para que de una vez por todas los Rockets lleguen al estrellato ejemplifica mejor que ningún otro ese todo o nada. Ron Artest será jugador de los Rockets el día 14 de Agosto mientras que hacia Sacramento volarán Bobby Jackson, un jugador por definir y el rookie Donte Greene que de esta manera conocerá la gorra de su tercer equipo NBA. Precisamente el rookie es que el que marca la limitación del 14 de Agosto ya que estampó su firma en el contrato con los Rockets el 14 de Julio y por convenio hasta que pueda ser traspasado debe transcurrir un mes.

Aunque Artest aún no es un Rocket la polémica que siempre acompaña a este rocoso, y talentoso, alero ya se ha dejado notar en Houston. Yao Ming fue el primero que al enterarse del traspaso destapó el tarro de las esencias al pronunciar la palabra "química de equipo" haciendo alusión entre otros a los acontecimientos del año 2004 y la multitudinaria pelea en el Palace of Auburn Hills que propició la severísima sanción de 73 partidos para el que inició todo aquello. Estos comentarios y algunos más de la misma índole fueron efectuados por Yao en su preparación para los juegos Olímpicos, pero lo que no pudimos pensar es que no habría reacción por parte de Artest, "I understand what Yao said, but I'm still ghetto. ... I'm never going to change my culture. Yao has played with a lot of black players, but I don't think he's ever played with a black player that really represents his culture as much as I represent my culture."

O lo que es lo mismo, el lío está armado y ni siquiera es oficial el traspaso. Ron también pidió un compromiso del equipo como parte inequívoca para jugar en los Rockets y ese compromiso vino en forma de llamada telefónica, los dos implicados en declaraciones a la prensa hablaron directamente y sacaron conclusiones en claro y deberán aprender a convivir y tolerarse por el bien común.

Porque una cosa está clara, un Artest centrado y bien llevado puede hacer muchísimo bien a los Rockets. El encargado de encauzar todo el talento disponible será Rick Adelman, y precisamente él es el técnico más valorado por Artest y con el que ya coincidera en los Kings. El abanico de posibilidades que abre Ron-Ron es espectacular, desde contar con un sexto hombre como Shane Battier saliendo desde el banquillo hasta la posibilidad incluso de que ambos compartan pista durante varios minutos en las posiciones de tres y cuatro ya que entre ambos pueden hacer un buen trabajo defensivo al cuatro rival, así podrían dar descanso a los interiores donde están algo más justos. Defensa espectacular y talento ofensivo es lo que convina Ron, pero también es cierto que se tendrá que acostumbrar a ser la tercera opción ofensiva del equipo, y por ahí tampoco sabemos la repercusión que tendrá ya que si algo necesita Ron-Ron es ser importante allá donde esté.

Pero incluso más importante para ellos será que estén sanos, algo que no es fácil visto lo visto, y que las cosas vayan bien desde el principio porque si ya han tenido esta polémica entre dos de los tres jugadores más importantes del equipo ya podemos intuir que una chispa vuelva a encender todos los ánimos es más que posible, y las chispas surgen cuando la cosa va mal con suma facilidad.

Como siempre el carácter de Artest le acompaña y hace surgir muchas dudas alrededor suyo, pero que se lo pregunten a los Pacers que desde aquella fatídica pelea en el 2004 parece que ahora, verano del 2008, es cuando empiezan a levantar cabeza. Como empecé diciendo, todo o nada para estos Rockets...