Cuatro Largos Años

Son los que han pasado desde que los Detroit Pistons con el movimiento maestro por parte de Joe Dumars de la llegada de Rasheed Wallace desde Portland vía Atlanta, dónde jugó un único partido, consiguiesen el tercer anillo para la franquicia afincada en Michigan.

Ya antes de la llegada de Sheed eran un equipo muy competitivo con un objetivo muy claro, la lucha por la supremacía de la entonces débil Conferencia Este, de hecho antes de ese glorioso año 2004 los Pistons de la mano de un entrenador que se encontraba ante su primera andadura como head coach, Rick Carlise, ya habían conseguido llegar a las finales de Conferencia.

Ese fue el cénit de este bloque, el anillo, y aunque al siguiente año volvieron a luchar por él frente a los San Antonio Spurs la historia empezó a cambiar para ellos con este decisivo tiro. Ya no inflingieron el dominio que les habíamos visto ejercer sobre aquellos deteriorados Lakers. La serie se alargó hasta los siete partidos y ya sabemos que pasó, los Spurs consiguieron igualar a la franquicia de la MoTown con 3 anillos de campeón.

Desde entonces los Pistons han seguido cosechando grandes temporadas regulares aunadas con no menos grandes fracasos en la postemporada. Curiosamente, o no, siempre han conseguido alcanzar las finales de Conferencia, pero una vez ahí han visto como sus esperanzas quedaban hechas añicos. En el año 2006 fueron eliminados por los Miami Heat del correoso Dwyane Wade y un Shaquille en las últimas, en el año 2007 LeBron James se vistió de superhéroe y los detrozó, para muestra aquel anotológico quinto partido. Este mismo año han sido eliminados por los Boston Celtics, hecho que ha propiciado la reedición de una mítica final frente a los Lakers de Kobe Bryant.

En temporadas anteriores eran absolutos favoritos para llegar a Las Finales de la NBA, pero ya incluso este año pese a realizar algunos retoques en jugadores de banquillo, refrescando así al equipo, ya no llegaban a ese nivel. A última hora cuando se vio que empezaban a funcionar como muy pocos pueden se les llegó a calificar de grandes tapados, pero nuevamente la barrera de las finales de Conferencia les hizo parar en seco.

Los años han pasado y los resultados siguen siendo los mismos, pero si algo ya no es lo mismo es la edad de los grandes protagonistas, este quinteto titular que desde la llegada de Sheed sólo ha cambiado en un nombre, precisamente el del compañero de éste en la pintura, Ben Wallace, se hace mayor, demasiado mayor. Salvo Tayshaun Prince el resto de integrantes del quinteto titular superan a día de hoy la treintena de años. Parece que el ciclo de estos fenomenales Pistons se acaba, y los rumores acerca de cambios en el eslabón más débil de la cadena, el entrenador, ya han empezado. ¿La confirmación? Una negación...

Pero Joe Dumars no debe quedarse solamente ahí y a mi juicio los cambios en la plantilla deben ser más profundos porque está visto que los años pasan y están estancados en el mismo, altísimo, nivel de juego. La psicología puede empezar a pasar factura, y pese a que su juego es espectacularmente bueno por el mero hecho de ser jugadores de una altísima calidad y llevar muchos años jugando juntos no parece que estén llamados a un nuevo anillo, y no debemos pasar por alto que ese debe ser el objetivo último de cualquier franquicia.

Pero, ¿qué movimientos hacer?

Su nivel de juego es altísimo, como he repetido varias veces con la idea predemitada de no perder ese hecho de vista en ningún momento, por lo que tampoco debe tratarse de varios movimientos en cadena y drásticos. Con cambiar a algún jugador que pueda tener un buen valor en el mercado y conseguir a cambio sabia fresca al igual que proyección de futuro, draft, creo que sería suficiente. No renunciar por completo a este proyecto que ha conocido las mieles del éxito, pero si cambiarlo significativamente. El hombre que se me ocurre que pueden cambiar es el de Richard Hamilton, ya que creo que en el mercado va a ser el que alcance un valor más alto, y además está por edad en su mejor momento, donde se aúnan las cualidades físicas con todo lo aprendido en su ya dilatada carrera y larga experiencia en momentos decisivos.

Desde luego esta tiene que ser una temporada triste para los seguidores de los Pistons, parece que algún cambio es inevitable y con ese cambio se perderá la magia de este equipo, un equipo que a pesar de haber levantado varias fobias entre algunos de nosotros, al menos para mi siempre tendrán un hueco en mi corazoncito, y con este "artículo" les rindo mi particular homenaje y deseo a sus integrantes lo mejor.

Resumen de estos largos cuatro años

UPDATE (04/06/08):

En declaraciones de Joe Dumars que recoje el Chicago Tribune: "There are no sacred cows here," Dumars said. "You lose that sacred-cow status when you lose three straight years." Supongo que no traspase en bloque, pero escucha ofertas por cualquiera. Postura acertada a mi juicio. También es un hecho como se lee en los comentarios que Flip Saunders no volverá a entrenar a estos Pistons.